Odio impotente

Hace unas horas hemos recibido la triste noticia de que un demente ha arrancado un brazo a la figura del Jesús del Gran Poder, de Sevilla.

Para los lectores de mi blog que no lo sepan, la talla del Jesús del Gran Poder es obra de Juan de Mesa, escultor barroco del s. XVII y es una de las imágenes religiosas más simbólicas del catolicismo en España, junto a las sevillanas vírgenes Macarena y Esperanza de Triana, El Cachorro -también de Sevilla-, la Virgen del Rocío y La Moreneta de Cataluña.

Hay otras muchas imágenes dignas de devoción en España, pero las seis citadas son las más apreciadas por todos los españoles católicos.

No es la primera agresión que se realiza en los últimos años contra imágenes religiosas en nuestro país: hace unos meses se produjeron varias agresiones contra belenes públicos y, anteriormente, nos sorprendieron con pintadas en iglesias, insultos a los feligreses mientras celebraban la misa e, incluso, un fallido intento de bomba mientras se celebraba una de éstas.

Todo esto es una muestra más del perro ambiente antirreligioso que ha instalado en nuestro país ese Satanás de Zapatero, del que yo me reía al principio llamándole "Anticristín", pero al que finalmente Lucifer parece que va a acabar atándole los zapatos.

Desde la llegada de este vomitivo personaje al poder, con su séquito de antiestéticas ministras (física y moralmente), no ha habido ni un momento de descanso para la persecución religiosa: prohibición de crucifijos en los colegios, obstáculos para que los niños instalaran belenes en los mismos, instauración de ridículos matrimonios homosexuales anticristianos (y antijudíos, antimusulmanes, antibudistas, antihinduistas... es decir, antilógicos...), promoción de técnicas masturbatorias en la educación sexual de los jóvenes, continuas críticas a la Iglesia, soez cachondeo contra la misma en todas aquellas emisoras televisivas sumisas al socialismo (es decir, en aquellas que suman más de tres...), obstáculos a la procesión del Cristo de los Legionarios, prohibición de que los militares honrasen a las imágenes interpretando el himno nacional...

...Un sinfín de despropósitos, a cada cual más ridículo y acomplejado.

Estos "locos" que últimamente están surgiendo como setas no son más que el producto de la política antirreligiosa de Zapatero, que, aunque se autotilda de "demócrata", no quiere tener en cuenta que más del ochenta por ciento de la población española somos católicos (más o menos practicantes, pero católicos al fin).

Este poseso Stalin que nos gobierna, este gran bobo sin parangón, este arruinador de España, esta Atila de la moral, la lógica y el bienestar no merece más que el desprecio universal.

Sólo os pido una cosa, que repito a lo largo de mis posts:

No olvidéis.

No os contentéis con que el Partido Popular gane las próximas elecciones y sustituya a este merluzoide.

Todo el daño que este sujeto ha hecho a España nunca deberá ser olvidado. Todo el odio preguerracivilista que tal infame ha inoculado en nuestro espíritu, con su memoria histérica, debe serle devuelto con creces.

Una pérdida de poder no bastará.

El Juicio de España le espera a la vuelta de la esquina.