Para nuestro vicepresidente y aspirante a presidente, Alfredo Pérez Rubalcaba, la semana pasada resultó ser una de las "peores semanas" de su vida...
Puede resultar sorprendente que, para quien había sido señalado a dedazo por su partido, precisamente durante esos días, como "tapado" para las nuevas aspiraciones presidenciales, dijera que había sido una mala semana... Pero, claro, él se refería a la soberana y merecida derrota que su partido -transfigurado en secta- había recibido...
¿Pero acaso, señor Rubalcaba, no ha sentido como "peores" otras semanas durante el tiempo en que usted ha estado saltando de puesto en puesto a cargo de nuestros impuestos...?
¿No cree que han sido mucho peores todas a aquellas semanas en que la Encuesta de la Población Activa fue añadiendo dígitos a la ezpeluznante cifra de paro que el inútil gabiente del que forma parte ha provocado...?
¿O la semana en la que Bildu accedió a la legalidad por obra y gracia de los magistrados del Constitucional que ustedes mismos han nombrado...?
No... para usted esas tragedias son pecata minuta... Para usted y toda su cuadrilla de palmeros socialistas, lo verdaderamente grave es perder poder...
A usted le da lo mismo que millones de personas anden en la completa miseria por su culpa... Que las famélicas manos del socialismo quieran igualarnos a todos en la pobreza... Menos a ustedes...
Su auténtica catadura moral ha quedado manifiesta con estas palabras...
Y la exquisita "sensibilidad" socialista para con la gente de verdad necesitada...
¿Es el fin de Estados Unidos? La decadencia de un imperio
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Existió una profetisa búlgara, Baba Vanga, famosa por el acierto de sus
predicciones. A ella iban a consultar altas personalidades, e incluso
militares, ...
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